EL PIB
La variable macroeconómica más citada es el producto interior bruto (PIB).
El PIB de un país es su producción de bienes y servicios en un periodo determinado.
Una forma de medirlo es utilizando la fórmula PIB = Cpr + Ipr + G + X – M, donde:
Cpr es el consumo privado de las familias
Ipr es la inversión (ahorro) privada de familias y empresas
G es el gasto público de las distintas administraciones públicas (Estado, autonomías, ayuntamientos, etc.),
X son las exportaciones
M las importaciones.
Normalmente, el crecimiento de un país se mide comparando su PIB entre dos periodos de tiempo. Si un país o zona geográfica aumenta su PIB de forma considerable se considera que ese crecimiento favorece el bienestar de sus habitantes, y a la inversa, cuando decrece se considera que lo disminuye.
¿Qué es el 0,7%?
La propuesta de destinar un % del PIB de los países ricos
como ayuda oficial al desarrollo de los países del Sur se remonta a finales de
la década de los cuarenta y principios de los cincuenta, cuando varios informes
de la ONU cuantificaron las necesidades de capital de los entonces llamados
países en vías de desarrollo. El interés de la ONU en aquella época era
promover un cierto flujo de capitales del Norte hacia el Sur para ayudar al
desarrollo económico de estos de países. La primera formulación de un porcentaje
concreto fue realizada en 1958 por el Consejo de las Iglesias que solicitó a
los países ricos que destinaran el 1% de su renta nacional a la ayuda al
desarrollo.
En el último tramo de los años 60 se inician movimientos de
reivindicación en las naciones más poderosas y se decide dar el 1% de PIB en
concepto de ayuda el desarrollo para erradicar la extrema pobreza en los países
empobrecidos. Este 1% se desglosó en un 0'7% público y el resto el, un 0'3% a
cargo de las empresas privadas.
En mayo de 1972, en el marco de una conferencia sobre el
comercio y el desarrollo, las Naciones Unidas adoptaron en la resolución 61 el
objetivo de destinar el 0,7 % del PIB de los países mas industrializados a
Ayuda Oficial al desarrollo para los paÍses empobrecidos del Sur.
Esta propuesta de destinar el 0,7% del PNB ha sido
ratificada en posteriores Cumbres de Naciones Unidas como la de Río de 1992, y
reafirmado permanentemente en España por todos los partidos políticos, no solo
en ellas sino en acuerdo concretos y nacionales como el Pacto de Solidaridad
firmado por Loyola de Palacios en el año 1995, ratificada en la Cumbre de
Monterrey en el 2000, y en los Objetivos del Milenio para el 2015.
A
pesar de que ya ha transcurrido casi medio siglo desde su adopción, la Meta del
0,7 continúa plenamente vigente y se mantiene en la agenda de muchos de los
países ricos, como demuestra su consecución por parte de Reino Unido en 2013,
bajo un gobierno conservador y con el país aún recuperándose de la crisis
económica.
Lamentablemente, no todos los países ricos se muestran igual de
dispuestos a asumir el compromiso que adoptaron en 1972 en la Asamblea General
de la ONU y, de hecho, la media de los donantes nunca han superado el
0,40%.
¿Crees que España cumple con su compromiso de donar el 0,7% de su PIB para ayudar a los países pobres? Puede ser un buen ejercicio investigarlo.